Los mejores métodos de limpieza de parqué

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Mantén tus suelos de parqué o tarima siempre relucientes

La madera en tus suelos da un ambiente cálido y elegante a tu vivienda. Para mantener siempre las superficies de madera con un buen aspecto y con un brillo como el primer día es conveniente conocer algunos trucos sobre su cuidado y limpieza. Para ello lo primero que debes hacer es conocer las características de tu parqué o de tu tarima flotante para saber qué método de limpieza aplicar.

Consejos para que tu suelo se mantenga como el primer día

Para que tus suelos de madera luzcan un aspecto extraordinario y deslumbrante te vamos a dar algunos consejos muy útiles de parte de nuestra empresa de limpieza en Madrid.

• Si tus suelos son de parqué de madera natural la mejor manera de limpiarlos es con una bayeta un poco húmeda con agua y un producto especial para estas superficies, para suelos aceitados. Estos productos además de limpiar, nutren y conservan la madera. Si en lugar de bayeta quieres emplear una mopa o una fregona también puedes, será más fácil. Los expertos en suelos de madera recomiendan no usar cera en este tipo de parqué de forma continuada, ya que se puede formar una película opaca que con el tiempo será muy complicado eliminar. También desaconsejan andar en casa con zapatos de la calle, son muy delicados a los arañazos y manchas. Podemos llevar en la suela restos de arena y de polvo que dejarán roces y marcas en nuestro parqué. Es aconsejable usar la aspiradora para eliminar la suciedad.
• En el caso de que tengamos en nuestra vivienda suelos de parqué de madera maciza, debemos saber que este tipo es muy sensible a la humedad. Recomendamos utilizar una mopa seca, ya que el agua le puede dejar manchas. También aconsejamos lijarlo con cierta periodicidad y volverás a tener un parqué a estrenar. Hay expertos que recomiendan acuchillar el suelo de madera cada diez años para que vuelva a recuperar sus características y belleza originales.
• La tarima flotante es mucho más resistente que la madera maciza o la natural y por lo tanto no requiere un cuidado tan especial. Para su correcta limpieza debemos utilizar productos que no contengan ácidos. Se puede fregar con jabón neutro humedeciendo la fregona con un poco de agua. Tampoco conviene fregarlo a diario, mejor cada tres o cuatro días. Para evitar la humedad en el suelo conviene escurrir muy bien el mocho. Estos suelos suelen ser muy resistentes y casi se pueden limpiar como un suelo de gres o de cerámica. Son capaces de resistir arañazos y golpes. Aquellos que son de buena calidad ni se deforman ante inundaciones de agua.
• En ocasiones habrás oído que es bueno utilizar vinagre para limpiar los suelos de madera. Antes de que existieran los limpiadores actuales para madera sí se usaba este remedio casero, pero está demostrado que el vinagre es muy ácido y no es recomendable para la madera barnizada.
• Evita también el uso de productos de limpieza que contengan ceras o siliconas, pueden estropear el barnizado del suelo.
• Es evidente que el mejor cuidado y mantenimiento de un suelo de madera es protegerlo y prevenir daños y desperfectos. Recomendamos por tanto poner protectores en las patas de las sillas y mesas. Ni que decir tiene que debemos evitar correr muebles arrastrándolos. También puede ser muy beneficioso para nuestro suelo protegerlo con alfombras.

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